Existen personas que te soplan las rodillas en las caídas y te acompañan en el dolor sin intentar tocarlo.
Existen personas que no te dan consejos si no se los pides, que te escuchan hasta que te vacías de aquello que te pesa o hasta que, al menos, deja de pesarte tanto.

Existen personas que confían en todo lo que llevas dentro.
En definitiva, existen personas que son muros de contención: Te abrazan tan fuerte que evitan que se te escape la vida.
Que hoy, mañana y en todo momento, serán casa.
El hogar al que siempre regresas”.
Créditos a quien corresponda.

No hay comentarios:
Publicar un comentario