Encontré esta madrugada
Una palomita blanca
Que el viento había extraviao.
Porque es tuya la he cuidao
Con cariño y con desuelo,
Y la cinta color cielo
Con que venía adornada
Al cuello la llevo atada,
Por ser cinta de tu pelo.
Martín Coronado
(Buenos Aires, 1850-1919) Escritor argentino.
Estudió derecho y humanidades y compaginó su puesto de funcionario con la dedicación a la literatura. Formó parte de la Academia argentina, que llegó a presidir en 1876 y 1878.
Es autor de poemarios (Poesías, 1873) y, sobre todo, de obras de teatro, tanto en verso como en prosa.
El dramaturgo y poeta argentino Martín Coronado fue en su época el autor paradigmático del melodrama social.
Su dramaturgia, de fuerte carga retórica, narra historias sencillas que defienden los valores tradicionales (familia, patria y honor) y construye los personajes con simplificado maniqueísmo, oponiendo el héroe bueno y humilde a un villano cruel.
Desde principios del siglo XX la crítica más avanzada comenzó a considerarlo un autor arcaico. No obstante, la línea melodramática de Coronado tuvo continuación en el teatro de Florencio Sánchez y Alberto Vacarezza, entre otros.
Se le deben las piezas teatrales La rosa blanca (1877), Luz de luna y luz de incendio (1878), Salvador (1885), Cortar por lo más delgado (1893), Un soñador (1896), Justicias de antaño (1897), Culpas ajenas (1903), La flor del tambo (1904), La tormenta de verano (1905), El sargento Palma (1906), La vanguardia y Parientes pobres (ambas de 1907), Sebastián (1908) y El hombre de la casa (1911). Su obra más recordada es La piedra del escándalo (1902), drama que tuvo su continuación en La chacra de don Lorenzo (1918), compuesto poco antes de su fallecimiento.
Martín Coronado escribió asimismo poemas de impronta romántica.
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