Ya falta poquito para que se acabe el año y nunca es tarde para ese sueño, para ese café, para ese viaje, para empezar algo nuevo, para hacer más de lo que te gusta, para volverte a emocionar, volverlo a intentar y pensar que las cosas pueden salir mejor.
Y si este no fue tu año, quizá sea el que sigue, o el que sigue, porque aunque a veces los malos momentos no dejen verlo, siempre llega una nueva oportunidad para ser feliz”.
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